Escuela Documental de Santa Fe

“La Escuela Documental de Santa Fe: un ciempiés que camina”, Bordigoni, Lorena y Javier Campo (co-autores), en Lusnich Ana Laura y Pablo Piedras (comps.) Una Historia del cine político y social argentino. Formas, estilos y registros. Vol. I 1896-1969. ISBN 978-987-1104-73-4. Buenos Aires, Nueva Librería, 2009.

El Instituto de Cinematografía de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) nace en 1956 impulsado por Fernando Birri, quién ve en el cine argentino y los espacios formativos de esos años, una falta y una necesidad: una cinematografía realista y una formación sistemática. Para Birri, tanto los films industriales como aquellos alineados a tendencias europeas e intelectuales permanecían alejados de las experiencias populares y de una forma realista. Si bien el cineasta reconoció a algunos directores preocupados por asuntos sociales, tales como Mario Soffici y Hugo del Carril, concibió como intención y praxis original y urgente la de un cine nacional, realista y popular.

Por otro lado, se entendía que la praxis cinematográfica y la educación artística carecían de método, itinerario formativo y líneas sistemáticas de aprendizaje. El empirismo, la ley de “prueba y error”, la espontaneidad, habían guiado gran parte de la instrucción y la práctica de los oficios. Por otra parte, los centros de enseñanza existentes carecían de peso dentro de la industria, no existía vínculo entre el campo de formación y el de producción, porque este último desvalorizaba el aprendizaje “fuera del estudio”, fuera del trabajo auxiliar junto a los técnicos. Así pues, el objetivo y el método (como conjunto de procedimientos, pasos a seguir en relación a un objetivo claro) que se propuso la escuela, fue el de realizar cine a través de una formación teórico-práctica enraizada en la construcción y el reconocimiento de la identidad nacional, en el marco regional caracterizado por el subdesarrollo. Desde esta perspectiva, el arte debía estar al servicio de la conciencia de clase, de su despertar y su esclarecimiento. Inserto en la coyuntura argentina, el cine que buscaba producir la Escuela investigaba el campo social, lo describía y analizaba, discutiendo las condiciones económicas y culturales en las que se inscribía su praxis artística. El campo social era su punto de partida y de llegada. El objetivo era indagar y analizar profundamente los problemas locales, y difundir las condiciones de (sub) desarrollo de las mayorías populares, deconstruyendo la imagen compacta, “falsa, reduccionista y reaccionaria”, que a su juicio existía sobre la realidad popular argentina.